

La empresa alemana Rheinmetall, uno de los mayores fabricantes de armamento de Europa, ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, impulsado por el aumento del gasto militar en el continente. En 2024, la compañía registró un beneficio neto de 717 millones de euros, lo que representa un incremento del 36% respecto al año anterior. Las ventas alcanzaron los 9.751 millones de euros, con un crecimiento significativo en sus divisiones de vehículos blindados, armas y municiones, y electrónica militar.
En respuesta a la creciente demanda de equipos militares, Rheinmetall ha anunciado la transformación de antiguas plantas automotrices en Alemania en instalaciones de producción de defensa. Asimismo, ha fortalecido su presencia en España con la creación de una planta en Navalmoral de la Mata (Cáceres), operada por su filial Rheinmetall Expal Munitions.
Este auge empresarial ha sido impulsado principalmente por contratos con países de la OTAN y por el contexto de tensiones geopolíticas en Europa, que ha llevado a un considerable aumento del gasto en defensa. Sin embargo, este crecimiento también ha generado preocupación entre organizaciones sociales y analistas, que advierten sobre los riesgos de la militarización de la economía y el rol que desempeñan las empresas armamentísticas en la perpetuación de los conflictos internacionales.
Puedes consultar el artículo original en El Salto Diario: Rheinmetall, una historia del “éxito” de vender muerte